Ya han comenzado las vacaciones de verano para millones de personas. Poco a poco según el estío avanza serán más los que tenga su descanso vacacional pero, a estas alturas puede que aún no haya podido decidir cómo disfrutar de sus vacaciones, si el motivo es económico trataremos de darle algunas ideas sobre planes baratos para estas vacaciones.
No esperes que hayamos descubierto el fuego; desgraciadamente los chollos imposibles no existen, pero si podemos traer algunas ideas que pueden hacer que encuentre nuevas vías para sus vacaciones en las cuales tal vez no hayas pensado y que pueden suponer un ahorro importante para tu bolsillo.
No te pongas destino
La primera opción para encontrar un plan barato de vacaciones pasaría por aprovechar las ofertas de última (diríamos ultimísima hora).
Esto no es para todas las personas ni para todos los caracteres, ya que nos obliga a estar esperando hasta el último momento con las maletas hechas para encontrar ofertas de última hora realmente sabrosas. ¿El premio? cuando se trata de completar plazas o de reservas caídas a última hora podemos obtener descuentos espectaculares, muy por encima de los descuentos por reserva anticipada
Si tienes los nervios templados y sabiendo que te arriesgas tal vez no encontrar exactamente lo que buscas esta puede ser una opción ya que este tipo de ofertas proliferan en la red sin un gran exceso de búsqueda.
De hecho vas a encontrar desde webs especializadas en ofertas de última hora hasta un apartado para estas ofertas en casi todas las webs de viajes. Sin embargo, ojo no todo son buenas noticias en estas ofertas de última hora. De hecho uno de los principales problemas viene dado por una publicidad no siempre clara en la que destaca la oferta de precio, que suele ser muy amplia, pero en la que no figura el resto de condiciones o condicionantes para dicha oferta. Y es precisamente en estas condiciones o condicionantes donde podemos encontrar problemas ya que generalmente son restrictivas y pueden restar interés y valor económico al descuento sobre todo a partir de precios ocultos o condiciones poco interesantes.
En cualquier caso se trata de una opción que siempre se debe tener en cuenta cuando queremos abaratar costes en vacaciones. Tal vez no sea la mejor opción para una familia con niños ya que, efectivamente, cabe la posibilidad de no encontrar un destino adecuado a última hora, pero sigue siendo una herramienta a valorar. Por otro lado recuerda que incluso en las ofertas de última hora existen grados, esto quiere decir que puedes encontrar perfectamente ofertas bajo el epígrafe de última hora que hagan referencia a vacaciones a no menos de 20 o 30 días, los descuentos suelen ser proporcionales, cuanto más cerca del viaje mayor volumen de descuento.
Vacaciones y ejercicio
Unas vacaciones deportivas no son el ideal de todo el mundo, pero, puede ser un buen plan para aquellos que no tienen mucho dinero para gastar.
Nuestro país afortunadamente dispone de una enorme cantidad de rutas para realizar travesías a pie, no sólo el Camino de Santiago. No es que estemos ante una opción super barata, pero, por motivos obvios, bien programada y con los gastos ajustados es mucho más económico que otro tipo de vacaciones.
Un plan barato para deportistas; encontrar una buena ruta y patear en vacaciones.
No debemos confundir esta opción con los grandes viajes orientados regularmente al senderismo o viajes de aventura, en este caso desde el punto de vista económico no tienen porqué ser viajes baratos ni mucho menos sobre todo si los destinos se encuentran a miles de kilómetros.
En cualquier caso tampoco debes plantear este tipo de viajes como un viaje económico como concepto. Ten en cuenta que es necesaria una buena equipación si planteas rutas largas a lo largo de días, y también deberás necesariamente alojarte y por supuesto tener en cuenta gastos de manutención. Sin embargo, la combinación ejercicio y control del gasto es perfectamente posible y puede proporcionarte unas vacaciones diferentes muy interesantes. Eso sí, recuerda que las grandes rutas a pie como el Camino de Santiago se encuentran tremendamente masificadas en los meses de julio y agosto.
Descubre aquí como sacar partido a las rebajas de verano
Te cambio de casa
Se ha convertido en una opción al alza en todo el ámbito europeo. Existen cada vez más plataformas en las redes especializadas el intercambio de vivienda para vacaciones. El mecanismo es sencillo; nosotros ofrecemos nuestra vivienda y nos ponemos en contacto con personas que desean veranear en nuestro entorno y que nos ofrecen a su vez otra vivienda.
A partir de este concepto básico vamos a encontrar fórmulas muy diversas pero que se resumen en prestar nuestra vivienda a cambio de otra y no tener que pagar alojamiento, con el consiguiente ahorro. Se trata de un modelo muy interesante si queremos disfrutar de unas vacaciones en el extranjero.
Tampoco hay que confundir esta opción con los alquileres vacacionales, más o menos legales, en domicilios particulares. Ese es otro recurso discutible cuando menos. En este caso lo que se trata es de encontrar personas que tengan interés en pasar un periodo de tiempo en nuestro entorno geográfico a cambio de ofrecer lo mismo, es decir, ellos nos deja su vivienda y nosotros les dejamos la nuestra durante un periodo de tiempo pactado sin intercambio económico.
Aquí ocurre un poco lo mismo que con las ofertas de última hora y es que realmente aunque tú tendrás una intención clara como destino esta intención puede perfectamente no cumplirse ya que no encuentres una casa en dicho destino, y sin embargo, al final podrás intercambiar destino con otras personas en lugares que tal vez ni sospechadas.
La ventaja principal de todo este tipo de opciones es evidente, un ahorro en el alojamiento que se puede traducir perfectamente entre el 30% y el 40% de los costes de vacaciones, si además le sumamos el hecho de tratarse de viviendas familiares totalmente dotadas, podemos calcular también una rebaja importante en gastos a la hora de la alimentación ya que podemos cocinar nosotros mismos, etcétera.
Las principales webs dedicadas a gestionar este tipo de opciones cuentan con decenas de miles de viviendas a disposición para el intercambio en un gran número de países de todo el mundo. Sin duda es una opción a valorar por lo que supone de ahorro y de posibilidades de acceder a lugares a los que tal vez en otras condiciones no podríamos.
En este post te damos ideas para tener unas vacaciones más baratas
Retorna a la tienda de campaña
Curiosamente la incidencia del campismo en nuestro país en comparación a otros países europeos con mayores niveles de renta, es muy baja.
Es cierto que existe un número creciente de campistas pero con un crecimiento relativamente leve en comparación a lo que sería de esperar. A pesar de que los camping también tienen un precio, el campismo es una opción de alojamiento veraniega que sobre el papel reduce los costes de estancia.
Ahora bien, haga sus números, si tiene que realizar toda la inversión de material campistas en este verano tal vez las cuentas no le salgan tan perfectas.
Realmente no hay que entender el campismo como una solución a corto plazo. La inversión necesaria para acampar de manera correcta una familia, sin ser exagerada, supone un gasto a tener en cuenta y si eso hay que sumar los costes de acampada en la red de camping de nuestro país, lo cierto es que puede ser que las cuentas no salgan. Ahora bien, cuando se valora esta opción como una inversión a medio o largo plazo las cosas cambian y mucho.
En la actualidad el campismo ha evolucionado de manera espectacular en tan sólo una década, tanto los materiales como la gran competencia del mercado ha hecho que nos encontramos ante productos de gran calidad a precios cada vez más asequibles, de manera que resulta mucho más confortable practicar la acampada que antaño.
Por otro lado en general las redes de campings proporcionan suficiente cobertura de destino tanto a nivel nacional como internacional, con un alto volumen de servicios y muchas posibilidades no sólo para la acampada tradicional sino también con ofertas de alquiler de cabañas, caravanas, etcétera.
Para muchas personas el campismo es un modo irrenunciable de vacaciones que se ajusta bien al bolsillo pero que además ofrece múltiples posibilidades, sin duda conviene tenerlo en cuenta y explorar nuestras opciones en este sentido.
Quédate en casa y disfruta
Para las personas que residimos en grandes ciudades el ritmo de vida cotidiano suele ser tal que nos olvidamos de disfrutar de lo que nuestras urbes pueden ofrecernos.
Si por el motivo que fuere no podemos disfrutar de unas vacaciones fuera de la ciudad, no debiéramos tampoco renunciar a lo que ésta nos puede ofrecer en verano. Aprovechar la agenda cultural, volver a descubrir los paseos y monumentos de la ciudad y por supuesto apuntarnos a todas las actividades gratuitas que nos parezcan atractivas, puede ser una manera de disfrutar aun no habiendo podido desplazarnos a otro lugar en vacaciones.
Es cierto que no todas las ciudades y localidades ofrecer el mismo volumen de actividades veraniegas, y también es cierto que el motivo de ser básico de las vacaciones es desconectarte de tu rutina, pero, muchas veces en las prisas cotidianas de nuestra vida nos olvidamos disfrutar del entorno inmediato, y esto puede ser un error.
Desde paseos y excursiones hasta actividades culturales, fiestas y actividades de ocio, lo cierto es que redescubrir los lugares en los que vivimos puede ser una opción muy atractiva cuando no tenemos posibilidades de veranear en otro lugar. Hay que tener una cierta disposición y desde luego no dejarse llevar por la frustración de no veranear fuera.
En el caso de las grandes ciudades desde luego el encanto del relajamiento que las vacaciones veraniegas ofrece en ámbitos como la circulación o el tránsito de personas, ya puede ser en sí misma una ventaja a tener en cuenta.
Recuerda que las mejores vacaciones son las que has planificado bien
Dicho todo lo anterior lo realmente importante es tener claro de antemano lo que vamos a elegir para nuestras vacaciones. Todo lo que tenga que ver con gasto siempre debe ser planificado, de lo contrario estaremos sujetos a los vaivenes del gasto no controlado que es el que puede destruir un presupuesto familiar casi sin darnos cuenta.
Aquello de fantasear durante todo el año con las vacaciones veraniegas en el fondo tiene mucho sentido si en vez de fantasear nos dedicamos a planificar, tomar decisiones, controlar los costes y destinar presupuestos de manera que cuando llega el momento de las vacaciones no sólo estamos ansiosos por disfrutar de este periodo del año sino también perfectamente preparados y nuestro bolsillo en perfectas condiciones de afrontar el gasto que vamos a asumir.