Diciembre, el mes en el que todos, en algún momento, deseamos escuchar nuestro número anunciado en el sorteo de la Lotería de Navidad. Y por supuesto, la gran pregunta: ¿qué harías si te sucede a ti? Comprar una casa, viajar por el mundo, o simplemente guardar dinero en casa… Cada persona tiene su propio plan, pero primero, por supuesto, hay que jugar.
Este año, parece que vamos a gastar un poco más en lotería. De acuerdo con la información de la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE), el gasto promedio por persona será de aproximadamente 73,84 euros. Eso son casi cuatro décimos por persona. Importante: si ganas el famoso «Gordo», no recibirás los 400.000 euros completos en tu cuenta. ¿Por qué? Porque Hacienda siempre interviene cuando el premio es mayor de 40.000 euros.
Los impuestos: un coste necesario
Aquí está la parte que nadie quiere oír pero que es importante: si ganas más de 40.000 euros, el 20% de la cantidad que exceda esa cifra se queda Hacienda. Por ejemplo, si ganas el cuarto premio, que son 20.000 euros, te los quedas completos porque no pasan el límite. Pero con el Gordo, la situación es diferente.
El premio de 400.000 euros se detalla de la siguiente manera:
- Los primeros 40.000 euros no se gravan (¡buena noticia!).
- De los 360.000 euros que quedan, el 20% (72.000 euros) se destina al Estado.
Por lo tanto, al final, tendrías 328.000 euros.
¿Y el segundo lugar? Son 125.000 euros, de los cuales Hacienda se queda 17.000 y tú recibes 108.000. Con el tercer premio, el premio es de 50.000 euros, pero después de pagar 2.000 euros de impuestos, recibirías 48.000 euros.
Aquí viene una buena noticia: una vez que pagas estos impuestos, el dinero que recibes ya no necesitas declararlo en la renta. En otras palabras, no necesitarás volver a justificar ese premio ante Hacienda. Por esta parte, puedes estar tranquilo.
¿Qué pasaría si compartes el premio?
Las cosas pueden volverse un poco complicadas. Si eliges compartir parte del premio con amigos o familiares, debes demostrar que el décimo era compartido desde el principio.
¿Por qué? Si no puedes demostrarlo, el dinero que entregues se considera una donación y, según la comunidad autónoma, podría ser gravado con el impuesto de Sucesiones y Donaciones.
Para prevenir confusiones, lo mejor es dejar todo claro desde el principio. Una forma fácil es hacer una fotocopia del décimo y firmarla, poniendo el nombre y DNI de la persona que lo guarda, así como los datos de los participantes y cuánto juega cada uno. Enviar una foto por WhatsApp o email puede ser una prueba, siempre que se registren los detalles de la entrega.
En los matrimonios, todo depende del tipo de régimen económico. Si son bienes gananciales, el décimo se divide automáticamente al 50%. Pero si tienen separación de bienes, es necesario probar quién compró el billete o si se comparte.
Tres meses para recibir el pago y otras curiosidades
Un dato que no todos conocen: tienes tres meses para reclamar el premio. Si la cantidad es menor a 2.000 euros, puedes hacerlo directamente en cualquier administración de lotería. Sin embargo, si pasas esa cantidad, deberás ir a un banco autorizado.
Ah, y una recomendación útil: si tienes suerte este año, tómate tu tiempo para pensar en qué hacer con el dinero. No hay que gastar o invertir todo de una vez. Hacer planes con calma puede tener un gran impacto a largo plazo.
Un final positivo
La Lotería de Navidad es más que un sorteo: es esa pequeña esperanza que nos hace soñar, aunque sea por un tiempo breve. Y mira, si este año no nos toca, al menos podemos disfrutar el momento con amigos y familia, hablar de los números y hasta reírnos de los «casi».
Buena suerte en el sorteo. Y si te pasa, ya sabes: disfruta, pero con sensatez. ¡Disfruta las fiestas!
