Ahorra energía al máximo en tu cocina

España es uno de los países en los que más tradición de cocinar existe. No hay más que viajar un poco para darse cuenta de que no son pocos los países en los que la comida rápida es el pan de cada día. Si esto se combina con la gran necesidad que existe en España de ahorrar dinero y de recortar gastos, obtenemos que los españoles podrían conseguir reducir bastante sus gastos modificando ciertas costumbres a la hora de cocinar

A continuación, vamos a dar algunas ideas que pueden ayudar a cualquiera a ahorrar en la cocina:

Ahorro en energía

Los electrodomésticos son todo gasto en energía. Conseguir reducir el gasto que estos hacen nos ahorrará un montón de euros.

Frigorífico

• Los frigoríficos nuevos pueden llegar a ahorrar el doble de energía que uno de hace 10 años. Uno de hace 20 años llegará a gastar hasta el triple que uno reciente.
• La labor de un frigorífico es mantenerse frío frente a la temperatura de todo lo que está a su alrededor, tanto dentro como fuera. Por esa razón, un frigorífico emplea más energía para enfriarse en verano que en invierno.
• Por lo tanto, en ambas estaciones supondrá un ahorro de energía localizar este electrodoméstico en una zona fresca y ventilada de la casa.
• El termostato: Bajarlo un poco en invierno es lo más sensato, ya que no es necesaria la misma energía que en verano para mantener la misma temperatura. Además, mantener la temperatura en los niveles medios ahorra energía y es más que suficiente para la conservación de los alimentos.
• Introducir alimentos calientes es totalmente desaconsejable, ya que consumirá mucha energía y pondrá en peligro la conservación de determinados alimentos. Después de cocinar, deje enfriar el plato al aire libre y luego métalo a la nevera.

Microondas

• Por supuesto, hay recetas para las que un horno de resistencia tradicional es imprescindible pero hay que tener en cuenta que un horno microondas consume menos energía.
• Para ahorrar energía con el microondas, siempre será recomendable tener uno relativamente nuevo y con buena eficiencia energética.
• Ajustar la potencia de cocción al alimento que se desea cocinar es muy recomendable, ya que tendemos a ponerlo a la máxima potencia y muchas veces no es necesario.

Cocina y horno

Ya sea de gas, vitrocerámica o de inducción, ciertos trucos siempre pueden ayudar a ahorrar una parte importante del gasto.

• Cocinar en olla a presión. Es un método sencillo para ahorrar bastante, principalmente porque el tiempo de cocción es mucho menor.
• No emplear utensilios de barro o de hierro para cocinar, ya que les cuesta mucho más coger temperatura y por tanto, se consume más energía.
• Emplear el tamaño de fuego apropiado. Un más pequeño requerirá más tiempo del necesario y uno más grande, desperdiciará energía.
• Adaptar la temperatura a cada momento. No se necesita la misma energía para freir una patatas al principio de comenzar a calentar el aceite que cuando está a punto de estar listas. Bajar la temperatura cuando toca ahorra energía y ayuda a conseguir un mejor punto al cocinar.

Lavavajillas

• Leer las instrucciones puede ser más útil de lo que parece. Aunque el funcionamiento básico sea similar en todos los modelos, cada lavavajillas tiene programas de funcionamiento particulares que si los conocemos, podremos usar en ciertas ocasiones y nos ayudará a ahorrar energía y agua.
• Parar el lavavajillas en el proceso de secado. Este funcionamiento calienta el aparato y lo ventila, de manera que los platos pueden salir casi secos. Si queremos conseguir un mayor ahorro, podemos detener el aparato en esta fase del programa y esperar a que la vajilla se seque con la puerta abierta.
• Usarlo solo cuando está a máxima capacidad nos puede ahorrar hasta un 40% de energía.

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