El verano se acaba, y a pesar de que aún el frío no ha llegado, este es un momento excelente para plantearse cómo mejorar el rendimiento de la calefacción en el hogar. Estas son algunas ideas para ahorrar con la calefacción.
Cosas que podemos hacer para reducir el gasto de calefacción
A continuación, vamos a repasar una serie de recomendaciones muy sencillas para conseguir reducir el gasto en nuestra factura de la calefacción en la medida en la que podamos modificar nuestra manera de utilizar este tipo de recurso.
Conviene aprender a reducir en la mayor medida de lo posible la mayor parte de nuestras facturas, ya que no nos encontramos en un momento sencillo para la economía española y mucho menos para la economía de sus familias, que se enfrentan a la crisis del coronavirus en otoño e invierno.
Establecer la mejor temperatura en el hogar para no disparar el consumo
Debemos comenzar por encontrar la temperatura idónea para nuestra vivienda, que según opinan los expertos, se encuentra entre los 19 y los 21 grados. De esta manera, cada grado que se salga de esta medida, nos va a suponer un aumento del 7% en nuestra factura mensual.
Para conseguir mentalizarnos acerca de estas restricciones en las temperaturas, no tenemos más que calcular que aumentar tan sólo 3 grados más de lo debido nuestro termostato, tiene como consecuencia directa una subida en nuestra factura del 21%. Y no nos encontramos en un momento en el que despilfarrar dinero sea lo más conveniente para nuestros bolsillos. Ya solamente por esta razón debe quedarnos muy claro que hay que asumir ciertas limitaciones para controlar nuestros gastos.
Instalar un regulador de temperatura
Si no queremos estar pendientes constantemente de nuestro termostato, lo mejor es instalar un regulador de temperatura que nos permite ajustarla fácilmente en cada momento. Por ejemplo, si nos encontramos en la vivienda pero vamos a salir durante un momento para hacer recados, podemos dejar el regulador de temperatura fijo en los 15 grados, que es la temperatura aconsejable para que la vivienda no pierda su calor mientras estamos fuera por un determinado periodo de tiempo.
Aislar la vivienda de la manera conveniente para no desperdiciar calor
Esto es algo fundamental, ya que si la vivienda tiene fugas de calor, da igual lo alto que pongamos nuestro termostato, que nunca vamos a obtener la temperatura deseada. Por ello, si detectamos que hay fugas, lo mejor es revisar el sistema de aislamiento del que dispone nuestro hogar. Quizás lo más conveniente es realizar una reforma adecuada para aislar bien el hogar y no perder más calor. Aunque supone un gasto de dinero considerable, a largo plazo será un ahorro importante, ya que hasta ahora el calor se ha estado desperdiciando sin remedio.
Si no sabemos identificar por donde se producen dichas fugas, debemos revisar lugares de la casa como ventanas, paredes, techos, rendijas o incluso el propio suelo, que son algunos de los lugares por donde más calor se pierde dentro de nuestras viviendas.
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