Cuando decidimos hacer un viaje, sabemos que tendremos diferentes gastos, ya sea en alojamiento, trasporte, excursiones, etc. Y uno de los gastos fijos que tendremos con certeza será el alimento. Así como podemos economizar en transporte, hospedaje y demás, también podemos hacerlo en las comidas. Aquí te dejamos una serie de ideas a tener en cuenta a la hora de pensar en qué comer.
- Si decides viajar a un lugar que no conoces, investiga antes de comenzar el viaje. Indaga sobre precios actuales, restaurantes económicos, lugares famosos por sus delicias, etc. De esta manera podrás realizar un presupuesto aproximado. Puedes preguntarles a amigos o familiares que hayan viajado antes a aquel lugar o buscar en foros de Internet. Los foros son aplicaciones que permiten a usuarios poder expresar sus ideas o hacer comentarios respecto al tema tratado.
- Procura consumir en lugares alejados a zonas turísticas o céntricas ya que estas zonas suelen tener precios bastante elevados aprovechando la gran cantidad de gente que allí se hospeda. Lo ideal es alejarte de toda esa muchedumbre y comer en un lugar sosegado, con buena comida, más tranquilidad y sobre todo a un bajo costo.
- Si bien la comida rápida no es la mejor opción en cuanto a alimentación, recuerda que tienes pocos días para conocer, recorrer, salir y divertirte. Por eso te sugiero parar de vez en cuando en un local de comidas rápidas. De esta manera, en poco tiempo estarás libre de nuevo para seguir con tus actividades al mismo tiempo que estarás ahorrando algunos billetes puesto que los restaurantes suelen ser mucho más caros.
- Siempre que puedas y te encuentres en tu hospedaje, prepara tu propia comida. Sin dudas es más económico y más sano comprar los productos que necesites en el supermercado y preparar tus propias comidas caseras.
- Olvídate de la tarjeta de crédito. Recuerda que si bien las tarjetas son más seguras y prácticas tienen la contra de que es difícil calcular los gastos que vas llevando y esto lleva a cualquiera a la perdición.
- Intenta comprar los alimentos en grupo. Siempre es más económico hacer un pedido grande que varios pequeños y de esta manera todos estarán consiguiendo un ahorro.
- Cuando pases el día afuera también puedes preparar tu propia vianda antes de salir y llevarla contigo. Si llevas tu comida lista, solamente quedará comprar una bebida fresca con lo cual estarás economizando varios billetes.
- Aunque intentes ahorrar en cada comida, igualmente te sugiero que te des el gusto y al menos una o dos veces experimentes las comidas típicas de la ciudad que visitas. ¡No te quedes con las ganas! Seguramente, a tu regreso, querrás contar a tus amigos sobre los lugares conocidos y las comidas tradicionales de la región.
Ten en cuenta que puedes disfrutar de todo lo que te interese no teniendo que pagar una fortuna para ello. Cuidándote en cada detalle podrás gozar de un viaje inolvidable sin descuidar tus finanzas.