Los médicos siempre nos han dicho que la manera más sana de alimentarse es hacerlo en horarios fijos. Hacer cinco comidas al día es lo que nos recomiendan. Desayuno, comida, cena tomando algo a media mañana y media tarde. Comer entre horas hace que engordemos en kilos y adelgacemos en el bolsillo. De las cinco ocasiones que tenemos, siempre nos han dicho que el desayuno es la más importante, si cabe más todavía para los más pequeños de la casa.
¿Cómo hacemos para ahorrar lo más posible alimentándonos lo mejor que podamos? Es una pregunta que todos nos hacemos siempre. Bueno, respondiendo esta pregunta, pero refiriéndonos a los adolescentes y a los adultos es lo más sencillo. Por la vida rápida que tendemos a tener, ir corriendo a todas partes, lo más habitual es salir de casa corriendo y tomar algo a media mañana cerca del lugar de estudios o de trabajo.
De esta forma rompemos dos recomendaciones, nos saltamos una de las comidas del día (la más importante) y gastamos dinero innecesariamente. Desayunar en casa y prepararnos algo para tomar a media mañana nos ahorrarán esos euros que nos gastamos todos los días. Cuando sales a media mañana a tomar algo raro es el día que no gastas menos de dos euros. Vamos a tirar por lo bajo, contabilicemos dos euros por cada día trabajado, esto son 440 euros al año solo una persona.
A poco que el núcleo familiar esté compuesto por más de dos personas y todos ellos hagan lo mismo, suponen 1320 euros, una cifra nada despreciable. La solución a esto es levantarse antes para preparar el desayuno y algo para tomar a media mañana. Como veréis la solución es bien sencilla, aunque está claro que muchas personas a las que esta acción les puede costar mucha fuerza de voluntad.
Con los más pequeños las cosas son bastante más fáciles, en teoría, se les levanta antes y se les pone a desayunar, que en muchas ocasiones quiere decir, se les da de desayunar, pero bueno, a los niños en edad escolar es más fácil darles el bocata o lo que sea para el recreo. En caso de que haya que madrugar mucho para hacer todas estas operaciones, se puedo optar por dejar preparadas algunas de las cosas la noche anterior, como podrían ser los bocadillos del recreo y el tentempié de media mañana de los adultos.
Ya veis que con poco, se pueden lograr dos objetivos fundamentales para la salud de una familia, tanto la económica como la del cuerpo de todos nosotros. Una no se puede medir a corto plazo, la salud médica es más difícil de medir y de arreglar, pero la económica es bien cuantificable. Cada cual que haga cuentas de lo que le pueden constar al año y que tome las medidas que crea convenientes.