Antes de comprar un producto, sobre todo si éste es un bien durable de costo elevado, es muy importante definir primero qué características y funcionalidades esperamos del mismo. Una vez definidas estas características, estaremos en condiciones de comparar precios de productos de diferentes marcas, pero con las mismas funcionalidades.
En la web hay distintos comparadores de precios, como por ejemplo en Comparum puedes comparar precios de diferentes productos, previamente clasificados y también informarte sobre las rebajas en vigencia.
Ten en cuenta que no sólo es importante el precio del producto, sino también los requisitos que tu esperas del mismo, para que sea útil. No sirve de nada comprar el producto más barato si luego no lo puedes utilizar en un 100% paro el fin que deseas. En esos casos es cuando lo barato sale caro, y por ello es mejor comparar los precios una vez verificadas las características y calidad de los bienes a adquirir.
Lo mismo puede decirse en el caso de las hipotecas y un buen ejemplo es Hipolisto, el primer comparador de hipotecas que da acceso a toda la oferta del mercado y añade el valor de las opiniones expertas de su comunidad de hipolistos.