Es una realidad el que estamos en crisis y, por tanto, debemos ajustar al máximo nuestros gastos para evitar sorpresas desagradables. No obstante, todos necesitamos un tiempo de ocio para desconectar y volver a recuperarnos tras el año de trabajo, de modo que volvamos con una mayor productividad tras las vacaciones.
Para que ninguno de vosotros tenga que renunciar a las vacaciones por el ahorro, hoy os traigo una serie de consejos para ahorrar en vacaciones; gracias a los que veréis que el ocio no siempre implica grandes desembolsos de dinero.
Para poder disfrutar al máximo de nuestras vacaciones sin estar pensando en el gasto que éstas están implicando en nuestra economía, es importante que antes de decidirnos por las fechas, el destino y el tipo de vacaciones, tengamos en cuenta diferentes aspectos que nos permitirán ahorrar al máximo y, gracias a los que disfrutaremos sin ningún tipo de preocupación.
Cómo ahorrar en las vacaciones antes de disfrutarlas
Lograr el máximo ahorro en cualquier compra o servicio dependerá, principalmente, del tiempo que dediquemos a su planificación. Por ello, es importante que no nos centremos en el ahorro de las vacaciones durante las mismas, sino antes de disfrutarlas. Para lograrlo, no os perdáis estos consejos:
- Las fechas previstas para las vacaciones serán la clave. En función de la demanda que exista en un momento dado sobre un bien o servicio, el valor y, por consiguiente, su precio se verá incrementado. Por ello, debemos buscar aquellas fechas que, dentro de nuestras posibilidades, no estén situadas entre las temporadas altas, logrando así que no nos apliquen las tarifas máximas.
- El destino: dependiendo de cuál sea nuestro destino, y de la fecha que hayamos elegido para ir, veremos cómo el coste del viaje o del alojamiento varía. Así mismo, si nos decantamos por viajar a otro país en el que el coste de la vida sea inferior, podremos ahorrarnos importantes cantidades de dinero, disfrutando de todos los lujos y todos los caprichos que nos plazcan. Un truco que puede ser de gran ayuda es fijarnos en las noticias, dado que las malas noticias de un país o un destino en concreto, harán que los precios de viajar allí caigan considerablemente. Por ello, si creemos que éstas son exageradas, es el momento perfecto para aprovechar e ir a conocer nuevos lugares.
- El alojamiento: no os fiéis de los grandes hoteles o de las opiniones demasiado favorables que encontréis en internet. Existen infinidad de alternativas para alojarnos cómodamente en nuestro destino sin tener por qué centrarnos únicamente en un hotel o en apartamentos turísticos. Cada vez es más frecuente el intercambio de pisos, ¿por qué no aprovecharlo? Implican muchas ventajas que, si no has disfrutado de ello, ni te imaginarías.
- Dedica tiempo a estudiar el destino: conocer la zona por la que vamos a movernos de antemano puede ayudarnos a ahorrar dinero; por ello, no te olvides de marcar en tu mapa de las vacaciones cuál es el mejor lugar para hacer la compra, cómo desplazarnos para conocer diferentes lugares, cuáles son los mejores sitios para comer y los más económicos, a dónde salir de fiesta, etcétera.
- Reserva tus vacaciones con mucha antelación o en el último momento: si nos adelantamos con la reserva de nuestras vacaciones a meses, o incluso uno o dos años en la reserva de nuestro alojamiento, podremos ahorrarnos más de la mitad de lo que nos supondría hacerlas entre los dos meses previos a las mismas. También existe la posibilidad, algo más arriesgada, de esperarnos al último momento para decidir a dónde ir, dado que suelen quedar plazas libres que ofertan a precios impensables.
