Descubre cómo conseguir el alquiler más bajo

Ya está aquí el nuevo curso. Para muchos, septiembre marca un inicio mucho más importante que el año nuevo. Por lo tanto nos atrevemos a decir: Curso nuevo, vida nueva.

Casa techo solar

Esta es la razón por la que muchos de los nuevos alquileres de pisos se efectúan en septiembre. Ya sea porque se es estudiante y comienza la universidad en otra ciudad, porque le ha tenido que desplazar su empresa, porque se muda en busca de oportunidades o simplemente porque quiere comenzar el nuevo curso en un sitio en el que se sienta más cómodo. Razones hay miles, pero pisos ideales, puede parecer que no tantos.

En este artículo, me gustaría ayudar a todo aquel que lo desee a encontrar el piso que desea al precio que desea. Cuando se alquila un piso para vivir en él, se espera que se convierta en nuestro hogar, por esta razón es muy importante encontrar un lugar donde nos sintamos cómodos y de esta manera, evitar malos humores y frustraciones.

Así como hace no tantos años el ahorro en una cuestión que, incluso, se podía llegar a tomar más como una opción personal que como una necesidad innegable, hoy en día no hacemos más que escuchar, leer y opinar sobre la importancia y necesidad del ahorro, algo que sin duda este período ya prolongado en el tiempo de crisis nos ha hecho entender con aquello de a sangre y fuego los conceptos quedan grabados para siempre. Sin embargo, en un panorama tan complejo como el actual, donde, seamos realistas, la media de ingresos en relación al nivel de vida ha caído de manera drástica, este empeño en el ahorro para muchos puede parecer una suerte de utopía, algo que se reconoce como bueno, pero que parece muy difícil de alcanzar. Si no lo tienes no lo gastas Habitualmente, cuando hablamos de ahorrar, lo primero que ponemos en juego es un estudio a fondo de nuestra economía personal; valoraremos nuestros gastos e ingresos y, de ahí, extraeremos nuestras posibilidades de ahorro, sin embargo, cuando nuestros ingresos son reducidos, a la hora de elaborar este plan puede que nos resulte complicado encontrar ese porcentaje de diferencia positiva destinado al ahorro; y aún así sabemos que debemos ahorrar. En este caso, y como tiempos difíciles medidas drásticas, nos quedan opciones, complejas y tal vez difíciles de asumir en inicio, pero que se pueden convertir en la única manera de ponderar realmente la importancia del ahorro; si no lo tienes no lo gastas, éste podría ser el principio del preahorro.  Y como lo hago No hay un manual del perfecto preahorro, aunque en todos los casos debiera comportarse de manera similar, tanto en aquellas personas que lo realicen porque realmente tienen un sobrante que pueden destinar a tal efecto, como en aquellos que se encuentren en la situación contraria. En este caso no vamos a valorar en primer lugar nuestros gastos e ingresos ni realizaremos a priori un estudio del resultado de cruzar ambos conceptos, al contrario, de manera directa consideraremos un porcentaje de nuestros ingresos (que puede ir entre 5% y el 10%) como un dinero que no está, o como un gasto obligatorio, al gusto del usuario. El sistema es realmente sencillo, hoy en día es verdaderamente simple automatizar el descuento equivalente a ese porcentaje de nuestros ingresos y destinarlo de manera mecánica a un producto de ahorro, por lo tanto, como vemos de lo que se trata es de ajustar los gastos una vez realizado ese descuento y no viceversa. ¿Es la solución óptima? Puede que no. Pero es una solución que se basa en aquello tan antiguo de apañarme con lo que tengo, y que nos obliga a realizar una revisión de nuestros gastos que, tal vez, con la manera tradicional de planificar el ahorro no seríamos capaces de realizar, ya que, puede suponer, reducir o eliminar determinados gastos que en primera instancia pudiéramos considerar innegociables.  En cualquier caso es una idea más que puede contribuir a ponernos en línea con algo tan serio, importante y determinante a futuro como nuestra capacidad de ahorro.

Vamos a dar algunas claves para conseguir el piso que se quiere al mejor precio:

Compara entre muchas ofertas de pisos

Siempre que se desee ahorrar, conviene comparar. Es la regla de oro. Aunque no es imposible conseguir en mejor precio y con las mejores condiciones en el primer piso que se mira, lo cierto es que se trata de algo bastante complicado. Antes de elegir un piso, conviene mirar muchas ofertas. No hace falta visitar todas las casas, pero es necesario visitar muchos portales de internet o agencias inmobiliarias. De esta manera también conseguiremos hacernos una idea real de cómo está el mercado inmobiliario y qué podemos exigir.

Fíjate bien en qué gastos incluye el precio del alquiler

En muchas ocasiones nos movemos sólo por la cifra más baja que nos dicen, sin pensar que en quizás se acaben sumando hasta 3 cifras a este precio si no incluye ningún gasto. Alguno de los gastos más típicos son: Gastos de comunidad, impuesto de basura, mantenimiento de la vivienda, averías, facturas, etc.

Es importante dejar claro desde el principio quién va a pagar qué, y cuanto más pague el casero, mejor para nosotros.

Sé realista

Es importante tener una idea real de cuanto cuestan las casas de cada tipo y en cada zona. No podemos pedir una vivienda grande, moderna y lujosa en el centro por 400 euros. Está bien tirar un poco por lo bajo para conseguir un buen precio pero sin pasarse.

Negocia el precio

Esto es lo más importante si queremos que nos reduzcan el precio. Negocia tanto el precio de alquiler como el precio de los gastos. Ten en cuenta que para el casero, conseguir alquilar el piso 50 euros más barato, por ejemplo en un piso de 800 euros, supone pérdidas, pero nada comparable a estar un mes sin alquilar el piso. Por esta razón, suelen negociar el precio de los alquileres.

Seguro que también te interesa: Cómo conseguir que el casero te baje el alquiler y Cómo solicitar la nueva ayuda al alquiler.

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