Durante el verano siempre se tiende a consumir sobre todo frutas más frescas y coloridas como el melón y la sandía. Pero muchas veces no se presta atención de los costes antes de llegar al mercado o hasta la propia mesa.
Los tomates se han encarecido 10,26 veces. Mientras que las patatas aumentan su precio 9,44 veces y del calabacín es 8,93 veces superior
Por lo que se ha conocido, sus precios están muy lejos de la retribución que se les abona a los agricultores que las plantan y las recogen, a partir de un informe de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), la Unión de Consumidores (UCE) y la Confederación Española de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (Ceaccu).
Para ser más claros, el precio de venta al consumidor de la sandía llega a ser 17 veces mayor que el que perciben los agricultores en origen, y este diferencial se llega a multiplicar por 14 en lo referido al melón.
El Índice de Precios en Origen (IPOD) (que se encarga de recoger la evolución mensual de los 25 alimentos más básicos de la dieta española) de Julio fue un 25% superior que en Julio de 2008, a causa de la fuerte caída de las cotizaciones de la fruta de verano en el campo.
No son los únicos productos que se ven encarecidos durante el transcurso de la cadena de valor, otro de los productos son los tomates para ensalada (10,26 veces), la patata (9,44 veces) y el calabacín (8,93 veces).
En lo referido a los productos agrícolas, la diferencia media de precios del campo a la mesa llegó al 6,48, y en los productos de origen ganadero, la diferencia media se ubicó en 3,23.
En conclusión se puede decir que todo el esfuerzo que realicen el sector productor para promocionar el consumo de fruta en verano se vuelve inútil si el consumidor al llegar al mercado y no se encuentra con precios asequibles. Estas fuertes subidas contrastan con los datos de IPC del mes de julio, cuando todavía se registraba
Acceso directo al Índice de Precios en Origen y Destino de los alimentos de COAG