Ya superaste la época de los gastos en pañales, en leches especiales para bebés, en juguetes didácticos y pensaste que los gastos en tus hijos al fin iban a disminuir. Sin embargo no tuviste en cuenta los importantes gastos que generan el comienzo del colegio. La ropa que van a vestir, los calzados, los útiles escolares, los libros de texto.
Es importante que antes de reventar tus tarjetas, consultes con amigos y familiares que tengan hijos mayores. Éstos tal vez no utilicen más la ropa o el calzado ya que sus respectivos hijos crecieron rápidamente y ya no les calzan las prendas. Por este motivo puede aprovechar para pedirles el préstamo de esas vestimentas para tus niños y de esta manera ahorrarás gran cantidad de dinero.
Lo mismo puedes hacer con los libros, que generalmente año tras años se utilizan los mismos textos por las docentes encargas de brindar la educación a los niños.
Otra buena estrategia es buscar y aprovechar las promociones, los cupones de descuentos y los sorteos de las grandes tiendas, asímismo es importante que recorras varios locales y ejecutes una minuciosa comparación de precios antes de realizar tu compra final.
Es una muy buena idea también, ponerse de acuerdo con las demás madres o padres de los compañeros de tus hijos y armar una lista en común para realizar las compras al por mayor y luego dividir los gastos. Va a ser notable la cantidad de dinero que pueden ahorrar todas las familias, implementando esta conducta.