La vuelta al cole es la realidad con la que todo padre tendrá que enfrentarse a la vuelta de vacaciones, con todos los gastos que ello supone. Estos y otros motivos hacen que la cuesta de septiembre sea una de las más complicadas de afrontar.
Muchos padres temen pensar en septiembre, no por la vuelta al trabajo, sino por el desembolso de dinero que la vuelta al cole implica para todos ellos. Y es que si nos paramos a calcular mentalmente el gasto que supone, no es de extrañar que teman el momento.
No obstante, las marcas blancas y su expansión a todo tipo de productos ha provocado que la vuelta al cole se abarate considerablemente. De este modo, hechos como solicitar tarjetas de crédito o un préstamo para poder hacer frente a todos los costes son ahora menos factibles que años atrás.
Cómo sobrevivir a los gastos de Septiembre
Por ello, hoy os proponemos hacer la lista de la compra basándonos en las marcas blancas, puesto que éstas abaratan hasta en un 30% la factura final del material para la escuela de los alumnos en la vuelta al cole.
No obstante, es importante que hagamos un estudio previo de cuáles son aquellas marcas blancas que nos ofrecen una mayor relación calidad precio, dado que los precios bajísimos tienen, en ciertas ocasiones, sus repercusiones en la calidad de los materiales.
Por ejemplo, a la hora de comprar lápices de colores, es importante que estemos seguros de que no se van a romper en cuanto vayan a pintar los peques. Aunque no por el hecho de que una marca blanca nos haya salido mal ya tenemos que repudiarlas a todas.
Para conseguir el máximo ahorro, será imprescindible evitar, en la medida de lo posible, elegir las marcas o productos escolares que hayan sido publicitados en televisión y que posean la imagen de algún ídolo de los niños. El simple hecho de que aparezca un personaje de animación en un cuaderno, por ejemplo, puede implicar que el coste del mismo sea 2 o 3 veces mayor que el de un cuaderno de las mismas características pero de pastas uniformes.
Otra recomendación importante es aprovechar los descuentos actuales de muchas tiendas y evitar comprar los materiales en septiembre. Si nos ponemos ahora manos a la obra, podremos reducir nuestra factura en una cuantía relevante que si lo dejamos para la fecha de inicio de las campañas de la vuelta al cole. Así mismo, nos evitaremos las colas, correr el riesgo de que ya se hayan acabado los productos más baratos y el estrés de correr contra reloj.
Como último punto, y antes de hacer la compra, deberemos revisar qué cosas nos valen del año anterior y cuáles no; pudiendo así llevar una lista real de las cosas que necesitamos. Es muy probable que si preguntamos a los niños, estos nos contesten que necesitan de todo. Por si acaso, comprobarlo, puede que ellos no se acuerden de donde lo tienen guardado o quieran estrenar nuevo material.
