La pandemia ha traído consigo, entre muchas otras modificaciones, algunos cambios que han venido para quedarse en los entornos laborales. Uno de esos cambios, que ya venía siendo tendencia en los últimos años, es mantener el aire de las oficinas lo más puro y limpio posible.
La llegada de la pandemia de coronavirus, tras el parón que supuso la paralización inicial de las actividades no esenciales en la primavera de 2020, y la posterior reincorporación en escalada al entorno laboral, nos dejó enseñanzas muy interesantes, y que han llegado para quedarse.
La tendencia de procurar mantener el aire puro y limpio en las oficinas, utilizando mejores sistemas de ventilación o un purificador de aire ya se encontraba incorporada dentro de las buenas prácticas en los entornos laborales como una tendencia creciente. Ahora, tras la confirmación de que la mala ventilación y entornos con mala calidad de aire facilitan el riesgo de transmisión de coronavirus, y de otras enfermedades, esta tendencia se ha convertido en una necesidad.
Los mecanismos de protección y calidad del aire en el entorno laboral, en este caso las oficinas, han llegado para quedarse. Por eso es importante reflexionar sobre los medidores y purificadores de aire, para qué sirven y cómo utilizarlos de manera correcta para generar buenos espacios, saludables y libres de contaminación.
Medidores y purificadores de aire
Aunque pueden existir modelos diferentes con usos más o menos complejos, los medidores de aire son instrumentos que nos van a permitir controlar si el entorno en el que trabajamos es saludable o no.
Generalmente, estos medidores utilizarán el dióxido de carbono como medida para la determinación de la calidad de aire. La acumulación de partes por millón, que es la medida básica, es la que determina si la calidad de aire es la adecuada o no. Este tipo de medidores, sobre todo en espacios cerrados, pero con presencia constante de personas, son fundamentales para determinar la necesidad de medidas de ventilación manuales o del uso de otras herramientas como los purificadores de aire.
Los purificadores de aire son una herramienta eficaz, complementaria con los medidores, e incluso complementaria con los sistemas de ventilación manual (abrir las ventanas) que pueden no resultar adecuados dependiendo de la climatología.
Un purificador de aire en una oficina lo que hará es generar la extracción de partículas de aire y filtrarlas a través de un filtro que vaya a capturar virus, bacterias, etc. Por tanto, es un proceso de filtrado que busca la reducción de partículas contaminantes que puedan afectar a la calidad del aire, y por extensión a la salud de las personas que trabajan en ese entorno.
En la selección del purificador hay que tener en cuenta que los mejores purificadores son los que utilizan los filtros con mayor capacidad de filtrado de partículas, generalmente se atribuye esta cualidad a los denominados filtros HEPA. Por otro lado, obviamente, es importante determinar el espacio en el que vamos a necesitar el uso del purificador, a mayor tamaño y cantidad de personas bajo el ámbito del uso de la herramienta, mayor potencia y capacidad de purificación deberá tener. Este tipo de purificadores pueden conseguirse en Canon Barcelona 22@