Cada vez más nos vamos acercando a esas fechas señaladas. Y digo señaladas porque lo son por todos, por los que las están esperando con ansia todo el año y por los que están deseando que pasen cuanto antes. Está claro que por unas causas o por otras en Navidad se acentúan los sentimientos, ya sean de felicidad o de desgracia. En resumen, que la Navidad ya está aqui.
Para las personas que han perdido un ser querido este año y las navidades suponía un momento de encuentro van a ser duras, pero así es la vida. En cambio para aquellos que tienen niños pequeños que por primera vez viven (y de que forma) la llegada de los Reyes Magos va a ser el auténtico regalo, verles esa ilusión y felicidad que solo los niños pueden transmitir.
El caso es que cuando llegan estas fechas es habitual que se monten una especie de mercadillos donde se pueden adquirir todos los artículos necesarios para adornar una casa. Cuando yo era pequeño, para mí la Navidad comenzaba el día que decorábamos la casa, que solía coincidir con el sorteo de la lotería.
A lo que íbamos, en estos mercadillos podemos encontrar todo lo necesario para entonar nuestro domicilio con aquellos adornos que creamos necesarios al efecto. Para los que son de Reyes Magos encontrarán todo lo necesario para montar el belén, los camellos, los propios Reyes, los pastores, las ovejas, el musgo, y cualquier cosa que se pueda imaginar que puede tener un belén como dios manda.
Pero para los que no son de belén también se puede encontrar a muy buen precio habitualmente, el árbol de Navidad, con todos los adornos que uno pueda imaginar que se le puede colgar, desde las típicas bolas hasta el espumillón pasando por las tiras de colores (no se me ocurre otro nombre) que le ponemos a su alrededor.
Todos los años se suele comprar algo para añadirlo a la ingente cantidad de adornos que suelen estar guardados el resto del tiempo que no es Navidad, así que estas Navidades no van a ser distintas y seguro que algo más se compra. Como ya os hemos comentado hace ya tiempo lo mejor es ir adelantando las compras que tengamos que hacer, siempre es una buena forma de ahorrar.
Imagen por cortesía de www.flickr.com
Ya es Navidad para los negociantes.