La capacidad de ahorro significa adquirir el hábito de separar dinero para tenerlo disponible en otra ocasión en donde nos sea más necesario. Ya desde niños, nos animaban a colocar en nuestra alcancía una pequeña parte del dinero que recibíamos en nuestro cumpleaños o cuando se nos caía algún diente. Cuando somos mayores podemos abrir una cuenta de ahorros para de esta manera depositar una cantidad del dinero que ganamos en nuestros trabajos.
En definitiva, el ahorro nos permitirá utilizar esa ganancia que apartamos para después poder disfrutarlo en esas ansiadas vacaciones o tal vez en metas más largo plazo como podría ser la compra de un auto, de nuestro primer hogar o para nuestra jubilación. Hay varias maneras de ejecutar el ahorro, por ejemplo podríamos guardar nuestro dinero en casa o bien depositarlo en una cuenta de ahorros en algún banco.
Invertir significa utilizar el dinero que ahorramos para comprar o invertirlo en una oportunidad empresarial en la que se podríamos obtener intereses o ganancias muchos mayores. Podemos invertir cuando usamos parte de nuestros ahorros para comprar bonos de ahorros, acciones o depositar nuestro dinero en algún plazo fijo.
Para planificar nuestro futuro y que éste sea próspero, lo más recomendable es que tengamos como una de las principales prioridades el ahorro. Cada mínimo dinero por más poco que sea. Ese dinero con el correr de los meses y los años nos dará una interesante suma con la cual podremos contar. Una vez que empecemos a ahorrar n os gustará que ese dinero trabaje para nosotros si lo invertimos de manera inteligente. ¿Por qué? Porque cuando invertimos dinero tenemos la grandísima oportunidad de ganar algo tan preciado e importante llamado interés.
El interés es nada más y nada menos que una tasa. Es el dinero que ganamos en una inversión o el dinero que se debe en un préstamo. Cuando los bancos nos dan crédito nos cobran interés o un porcentaje del monto del dinero que solicitamos, simplemente por utilizar el dinero que ellos nos prestaron. Por eso mismo, nosotros también podemos hacer dinero ganando interés cuando lo invertimos. Por ejemplo depositando dinero en un cheque que genere interés o cuentas de ahorros, bonos, plazos fijos, fondos del mercado de dinero, acciones o bonos de fondos comunes.
