Hoy en día quien elige un depósito como instrumento de ahorro sabe que se encuentra ante un producto que ha reducido de manera drástica su rentabilidad en los últimos años, pero, con especial acento en los últimos 12 meses. Es decir, sabe que se enfrenta a un ahorro que no ofrece mucho rendimiento, pero que, por el contrario, es de los más seguros dentro del panorama los productos financieros.
Aun así, a la hora de contratar un depósito por mucha importancia que se le dé al concepto de producto garantizado, e importancia que se le reste a otras cuestiones, debemos tener en cuenta al menos cuatro elementos básicos para no equivocarnos y elegir la opción que más nos conviene y con la que más a gusto nos vamos a sentir desde el punto de vista del ahorro.
¿Realmente sabes cuánto dinero debes ahorrar? en este post te damos algunas claves para acertar
Repasemos esos cuatro aspectos fundamentales;
Plazo e imposición mínima
Al tratarse de productos sin liquidez inmediata resulta básico tener claro que tanto la exposición mínima exigida como el plazo de imposición resultan acordes a nuestra necesidad. Por muy interesante que nos parezca un depósito si va a dejarnos sin ningún tipo de margen de maniobra durante un periodo de tiempo en el cual ese dinero puede ser necesario, el producto deja de ser interesante.
Tipo de interés en los depósitos
Es cierto que hoy en día la rebaja masiva de los intereses con los que se remunera las imposiciones ha llegado a tal punto que podría parecer que da igual un producto que otro, sin embargo, nada más lejos de la realidad, precisamente por lo bajas que se encuentra la rentabilidad es, hoy resulta más importante que nunca comparar bien los intereses que se nos ofrecen y tomarlos como referencia importante a la hora de la decisión
Las liquidaciones de intereses en un depósito
Aunque pueda no parecer tan relevante en el fondo si lo es, ya que, se trata del momento en el que vamos a percibir los intereses devengados por la imposición. Esto tal vez en un depósito a corto plazo no adquiera mucho sentido, sin embargo, en depósitos a largo plazo, retrasar al vencimiento la liquidación de intereses pueden no ser adecuada para todos.
La vinculación y las comisiones en los depósitos
Aunque sean dos cuestiones diferenciadas las vamos a incluir juntas. Es muy importante vigilar el nivel de vinculación que se nos exige, realmente hoy en día los mejores depósitos los vamos a encontrar precisamente en las ofertas de depósito bienvenida con vinculación, es decir, depósitos de un único uso para dinero nuevo habitualmente vinculados a algún otro producto de la capacidad. Esto que puede resultar interesante desde luego, ha de ser calibrado en su medida por el usuario en relación a lo que puede suponer la vinculación. Por otro lado, las comisiones, que ha tendido a desaparecer de los depósitos en los últimos años o al menos a minimizarse, debe ser también realizadas ya que, aquellas que se aplican pueden variar mucho el resultado final del producto teniendo en cuenta la escasa rentabilidad que hoy en día ofrece.
Los depósitos están bien para el corto plazo, pero no siempre te permitiran conseuir tus objetivos financieros. Hay otras fórmulas más adecuadas para lograr una alta rentabilidad para tus ahorros. ¡Descúbrelas!