Nuestra salud y estado físico es una de nuestras mayores preocupaciones, o al menos debería serlo, ya que sin salud todo lo demás no tendría sentido. En la actualidad cada vez más, la población dedica una gran parte de su tiempo y dinero en la realización de actividad física. El gimnasio se ha incorporado a nuestra vida cotidiana y también a un nuevo gasto mensual.
Si bien el gimnasio es considerado indispensable para muchísimas personas, en verdad no es imprescindible. ¿No tienes dinero para ir al gimnasio? Si tu situación económica no te permite pagar una cuota de un club, piensa que el gasto del gimnasio es uno de los más prescindibles. Y es evidente, también, que podemos estar en forma gastando muy poco dinero.
Piénsalo. Correr es uno de las actividades físicas más placenteras que existe. Para los que no tienen por costumbre salir a correr, pueden que les resultaría aburrido, pero sin embargo, una vez transcurrida la adaptación, las personas suelen decirse. ¿Por qué no empecé a correr antes? El secreto es comenzar con períodos cortos y con baja intensidad e ir incrementando las distancias con el correr de las semanas. Si tienes un parque o plaza cercana a tu hogar, es, sin duda, el mejor lugar. Correr por las calles de la ciudad no es tan agradable aunque también es una opción. Si vives en un pueblo o cerca de una playa sólo tienes que cruzar la puerta de salida y arrancar.
Si no te gusta ir a correr, hay otras alternativas para hacer deporte sin gastar dinero. En casa puedes hacer bicicleta fija, pesas, yoga. Siempre trata de buscar asesoramiento si piensas entrenar en tu hogar, para evitar malas posturas y lesiones. Si tienes una bici, ponte el casco y sale a pasear.
Sacar provecho a los sitios deportivos de carácter público es otra una opción muy interesante. A veces, ni siquiera conoces lo que hay cerca de tu hogar, como las piscinas públicas, canchas de tenis, baloncesto, fútbol, etc. De forma gratuita o gastando muy poco dinero.
Si no te gusta correr y prefieres el gimnasio, no hay problema. No es obligatorio dejar de ir al gimnasio para ahorrar dinero. Lo que debes tener en cuenta es que si eres de los que pagan la cuota y no le sacan provecho, es decir, acudes dos o tres veces al mes, no tiene ningún sentido. Por eso es necesario ser constante y disciplinado a la hora de encarar tu entrenamiento.
Si acudes seguido a entrenar, ten en cuenta que como en otros ámbitos, los gimnasios también se están adaptando a la actual situación económica. Conviene estar atento a las ofertas, sobre todo en los gimnasios nuevos. Puede ser que estemos muy adaptados a nuestro club, pero si el ahorro es significativo debes aprovechar las ofertas de lanzamiento. Sin dudas si quieres mantener un buen estado físico y ser más saludable sin gastar dinero, tienes muchas opciones. Ya no tienes más excusas. Es hora de empezar!