Aquí está lo prometido, otro post donde te daremos varios consejos acerca de cómo ser vegano y no morir en el intento. Al contrario de lo que mucha gente piensa, ser vegano es económico. Mucho más barato que gastar dinero comprando comida que contenga carne animal.
La base de la dieta son las legumbres, cereales y verduras, y son muchísimo más baratas que la carne, el pescado o los mariscos. Por ejemplo, las legumbres que son conocidas por sus altos valores proteicos, cuestan menos de 1€ el kilo.
Una gran estrategia para no gastar de más es NO comprar comidas preparadas, ya que éstas son mucho más costosas que si la cocinas tú. No es recomendable abusar de los almuerzos o cenas en restaurantes.
Aquí te enseñaremos algunas estrategias que puedes usar según tus necesidades. No se trata nada más de ahorrar dinero, sino también tiempo en la cocina. Lo mejor es cocinar tu propia comida rápida con los ingredientes más sencillos y económicos.
– Trata de evitar las comidas preparadas.
– Prepara tus propias comidas.
– Ahorra tiempo planeando las comidas, yendo a comprar y cocinando tus propias comidas.
– Aprovecha todas las sobras.
– Compra nada más que lo que necesitas.
Otros consejos:
Planifica tus comidas:
– Resérvate un tiempo para preparar el menú de toda la semana y elaborar la lista de la compra. Lo puedes hacer los fines de semana.
– Planea las sobras cocinando platos que generen más de una variante y aprovechando el tiempo para las demás comidas. Por ejemplo, si un lunes cocinas un salteado de arroz, prepara mucha cantidad para que el martes ya tengas sobra para cocinar un guiso de arroz.
-Trata de rotar las recetas para evitar que se repitan con frecuencia y utiliza especias para mejorar o cambiar los sabores de los ingredientes básicos.
– Confía en la base de la dieta. El arroz y la pasta dan para muchísimos platos diferentes, y sin dudas son de tus comidas favoritas. Además puedes utilizar tu imaginación y hallar la mejor manera de cocinarlos y combinarlos.
– No desaproveches nada. Utiliza todo lo que puedas. Con lo que te sobró de verduras, podrías cocinar hacer caldos y sopas. Antes de exprimir cítricos, congela las cáscaras, que te servirán para aprovecharla en tus postres y galletas.
– Cocina más cantidad de sopas y guisos, ya que son muy fáciles de preparar y adaptables a tu gusto. Además te permiten utilizar casi todo lo que tengas en tu hogar.
– Controla tu stock de las provisiones y procura que nunca te falten los más básicos: Cereales, legumbres y verduras, además de alimentos congelados, frutos secos, salsas y especias de todo tipo.
Esperamos todos estos consejos hayan sido de tu utilidad y los puedas llevar a la práctica para mejorar tu economía, sin dejar de lado la búsqueda de una vida más saludable, plena y organizada.
